ROSA CANDIDA.AUDUR AVA ÓLAFSDÓTTIR. Alfaguara. 2012
Arnljótur, es el protagonista que narra una parte de su vida en este relato, en el que lo más destacable es que la narración se produce sin sobresaltos. Lo cuenta todo en el mismo tono pausado.
La historia comienza con el protagonista, al que su padre llama Dobbi, está haciendo el equipaje para irse a una abadía que en otros tiempo tuvo un magnífico jardín.
Su madre ha fallecido en un accidente de tráfico y él se ha quedado sin esa persona que le llevaba de la mano por la vida. Su padre y su hermano forman un tándem perfecto en el que se encuentra fuera de lugar.
Tiene una hija de meses, fruto de la aventura de una noche con una chica a la que no conoce de nada que tampoco le ayuda a encontrar su sitio en el mundo.
Cuando llega a la abadía su vida transcurre en el trabajo con las flores, sobre todo las rosas, una especie que sólo se encuentra allí, la rosa cándida y la rosa de ocho pétalos que su madre consiguió.
Un giro inesperado trae a su hija y a la madre de su hija a vivir con él durante un corto período de tiempo, en el transcurso del cual parece que se encuentra así mismo en el papel de padre y amante, hasta que Anna decide que ése no es su lugar y decide marcharse dejándole la niña.
Dobbi vuelve al punto de partida, pero ya no está tan sólo, tiene una niña de diez meses a la que cuidar.
En resumen, este libro no me ha aportado absolutamente nada. Tampoco me ha disgustado, porque tiene párrafos narrados con mucha sensibilidad, pero no llega a meterte en la mente del personaje por lo que lo que podría ser una historia llena de luces y sombras se queda en la descripción de la vida de un muchacho sumamente sensible, tanto que no encuentra su lugar.
Menos mal que Iris me ha prestado los comic de Rosalie Bloom y me han hecho pasar un buen rato esta semana.
Un saludo
Grande Rosalie Blum! Qué pena que éste no te haya gustado, a mí me llamaba la atención...
ResponderEliminarRosa Cándida me ha gustado mucho. Está escrito con gran sensibilidad y creo que refleja bastante bien la sociedad actual islandesa.
ResponderEliminarMucho ánimo con el blog
Encarna.