martes, 28 de mayo de 2013

Capital

John Lanchester, Anagrama, 2013.

Capital es la historia de una calle de Londres: Pepys Road. Sus habitantes varían entre las familias de clase media que compraron la casa hace más de cincuenta años y los nuevos ricos que la han ido adquiriendo a medida que se revalorizaba la zona; y junto a ellos, otros personajes que encuentran trabajo en esas casas: el albañil polaco, la vigilante africana de aparcamiento o la niñera húngara. Un mosaico muy amplio de personajes: una anciana cuya principal ilusión es cuidar su jardín, un banquero de la City con un tren de vida altísimo, un jugador recién fichado para la Premier League, una familia pakistaní que regenta un pequeño comercio... Todos ellos recibirán en sus domicilios turbadoras postales con fotos de sus respectivas casas acompañadas del anónimo texto "Queremos lo que usted tiene". ¿Es una amenaza, una advertencia, una performance artística? De fondo, la crisis bancaria que se avecina, las dificultades de los inmigrantes, el poder del dinero, el terrorismo yihadista y tantos otros problemas que marcan la rutina de las urbes modernas.
Magnífica novela: ágil, perspicaz, empática, con personajes verosímiles y bien dibujados pese a que muchos se construyen con tan sólo un par de pinceladas. Fácil de leer, con capítulos cortos y un ritmo admirable, en absoluto lastrado por el gran número de personajes registrados. Leedla. Merece la pena.

viernes, 17 de mayo de 2013

Stoner

John Williams, Baile del Sol,

Me habían llegado ecos dispersos de esta novela desde varios flancos. Y son merecidos: Stoner me enganchó desde el principio y desde las páginas iniciales se hizo patente que tenía entre manos un libro de calidad.
William Stoner nace a finales del siglo XIX en una familia de agricultores y crece en un ambiente silencioso y seco. Con 20 años, sus padres le mandan a la universidad a estudiar agricultura; pero al cursar una asignatura de literatura siente un deslumbramiento y su vida cambia para siempre. Stoner permanecerá en el ámbito universitario, y continuamente dedicado a su vocación, asistimos a su conocimiento de la amistad, del matrimonio, de la paternidad, de los conflictos con los compañeros... Todo ello desde un estilo austero y eficiente, desde la soledad y la entrega. Stoner es una buena persona a la que le cuesta mucho expresarse, y para la que la voluntad ajena casi siempre está por encima de la propia. He leído que podría ser una figura pintada por Hopper, y estoy bastante de acuerdo. Me fascina cómo frecuentemente en las discusiones Stoner claudica al percibir que su interlocutor está siendo sincero al ofrecer su oposición; pero sin duda, lo que más me ha gustado es la capacidad de generar personajes muy verosímiles, tan reconocibles, con descripciones parcas, que se comunican con miradas y se aíslan en un mundo interior.

A mí me ha gustado mucho, os animo a hojearla porque merece la pena.

martes, 14 de mayo de 2013

Estaba en el aire


Estaba en el aire, Sergio Vila-Sanjuán, Destino, 2013
Estaba en el aire es la flamante ganadora del Premio Nadal 2013. Una novela corta que nos traslada a la Barcelona de los años 60 y todo lo que allí empezaba a surgir.
Sergio Vila-Sanjuán hace, a través de Tona y el resto de personajes, un claro esquema costumbrista de la vida en la ciudad condal de la última parte de la dictadura, una descripción social que abarca desde los grandes magnates y las empresas florecientes a los pobres más pobres de los suburbios.
Tona es, sin duda, la gran protagonista de la novela. Una mujer bien que empieza a estropearse la vida a golpe de amante para acabar manipulando al primer infeliz que le prometa un cambio de rumbo, prestigio y dinero.
Con un retrato plácido y objetivo Vila-Sanjuán se sirve de su propia historia familiar y del programa Rinomicina le busca para tejer un retrato de los inicios de SEAT, de los reencuentros familiares tras la Guerra, de las diferencias sociales entre los que van al club de tenis y los que cosen redes en la Barceloneta, el estraperlo, la presión del Régimen, la expansión de los medios de comunicación, del nacimiento del barrio de Pedralbes o los escarceos amorosos tan mal vistos en la alta sociedad catalana.
Con el único pero de las descripciones demasiado extensas a veces creo que es una muy buena novela, llena de pequeños guiños, de sátira, de historia, de ficción, de elementos comunes y de personajes bien definidos que evolucionan en cada página.
Leedla porque os gustará
Virginia