miércoles, 6 de julio de 2016

La mujer de la libreta roja

Antoine Laurain, Salamandra, 2016.
“Es imposible resistirse a esta novela: es la quintaesencia de la aventura romántica francesa” (The Times). Así reza la faja del libro, y una vez leído estoy de acuerdo:  todos los componentes que yo espero en una atmósfera francesa están presentes: mujer atractiva y delicada de pelo corto, gato y bailarinas, librero de nariz recta, paseos, cafés, parques, librerías… Y un sentido del amor, de la posibilidad, que lo sobrevuela todo.
Laure es atracada en la puerta de su casa. El incidente la deja sin bolso y con una fuerte contusión en la cabeza. Al día siguiente, Laurent encuentra el bolso en la basura. Cuando la policía no le soluciona nada al acudir a la comisaría, se lo lleva a casa y vacía su contenido buscando datos para devolverlo. Y poco a poco se va sintiendo atraído por la idea de la mujer que construye a través de su perfume, su libreta de notas, fotos antiguas… Pero, ¿cómo encontrarla?

Es una historia de segundas oportunidades, de azar o de destino. Es también una historia urbana, burguesa, ligera, que hace sonreír. La rutina laboral de Laurent como librero, las observaciones sobre Modiano, Nothomb o Sophie Calle, me han arrancado varias sonrisas cómplices. Me parece una buena lectura fresca para verano, para aquellos que buscan argumentos de amor que no se excedan de azúcar.