viernes, 8 de junio de 2012

La sonrisa etrusca


La sonrisa etrusca, José Luis Sampedro, Destino, 2011
Para destensar de tantos juegos de tronos he hecho caso a Carolina (por fin) y me he acercado a esta joyita. Imprescindible. Muchos hemos disfrutado de ser nietos, ahora somos hijos y quizá algún día seamos abuelos. Así que éste es nuestro libro. Porque sólo con el paso de los años y el regusto de los recuerdos uno se da cuenta de la importancia del nonno.
Salvatore (alias Bruno) es un viejo partisano que, obligado por la viudedad y un cáncer de mordida cruel, se traslada a Milán, a casa de su hijo y su nuera. A regañadientes, maldiciendo la gran ciudad, las costumbres de hoy en día y añorando su pueblo y sus rencillas ocupa el pequeño cuartito que será su fortín. Pero en cuanto pone un pie en ese territorio a priori hostil y se encuentra con Brunettino, su nieto, su concepción de la vida y de los hombres cambiará por completo.
Él, un varón de campo, cascarrabias, recio y “machista” sucumbe con ternura y profundo amor a ese pequeño hombrecito en que se convertirá el bebé que duerme en la cuna. Y en eso pasa los días, en educarlo, en hacer “cosas de mujeres”, en sacarle a pasear, comprarle unas botitas que le ayuden en los primeros pasos…
Enternece escuchar las palabras cargadas de sentimiento que cada noche le dedica a oscuras, vigilando su sueño. Emociona cuando guarda a escondidas un traje lleno de minúsculos botones que se le resisten para practicar con esas manos fuertes que le ha forjado la vida. Porque eso sólo lo hace un abuelo.
Me parece un precioso homenaje a todos esos hombres que quizá por la época, los roles familiares y el que dirán nunca se acercaron a sus hijos como lo hacen con sus nietos, sin nada que perder, a pleno corazón, con verdadero orgullo e ingenuidad.
Maravillosas las pinceladas sobre las relaciones de padres e hijos, que sólo con el tiempo y la llegada de una nueva generación son capaces de entenderse. Parece que es imprescindible ser padre para llegar a comprender al tuyo y ver reflejado en tu hijo el amor que a ti te tiene.
Sampedro no necesita frases grandilocuentes ni un lenguaje excesivo, la historia se sostiene sola, conmueve y traspasa. Verdaderamente genial.
Al acabarlo entiendes que es un libro que todo el mundo debería leer.
Ti voglio bene nonno!
Virginia

martes, 5 de junio de 2012

Detrás de la lluvia

Detrás de la lluvia
Ediciones B


La historia comienza con el encargo que hacen al investigador Corazón Rodríguez para que encuentre a Carlos, del que se perdió la pista en la Rusia de la II Guerra Mundial.
Como sale un detective lo denominan thriller histórico, aunque de thriller tiene más bien “ná”.

José Manuel se cría en un ambiente familiar oscuro, donde no hay sitio para él, que es una boca más que alimentar y no sirve para trabajar porque es un soñador. Rasgo que hereda de su padre que se pasa la vida intentando encontrar un tesoro que según la leyenda está escondido en una cueva. Mineros duros, de los que se levantaron en revolución para intentar un futuro mejor para los suyos.
El niño intenta sorprender a su padre encontrando el tesoro, y lo único que consigue es partirse una pierna y que un hermano suyo muera en su búsqueda. Como represalia, o intentando que el chaval tenga futuro, los padres le ingresan en el Seminario, para que haga la carrera de cura.
Cuando José Manuel está a punto de terminar la carrera estalla la República y evidentemente él no se libra de la persecución a curas y monjas. Sólo que tiene suerte y le salva del “paseo” un Capitán republicano, Carlos.
Años más tarde José Manuel le devuelve el favor librandolo de una “saca”, y escondiéndole con una familia afecta al nuevo Régimen hasta que termina la guerra.
Los dos unen sus destinos y vuelven a Asturias, donde un accidente en la mina termina con la vida de José Manuel.
Carlos viaja a Madrid, donde aún tiene familia y encuentra trabajo en la estación de tren donde descubre una trama de robos a gran escala. Por este motivo, y porque le imputan cuatro asesinatos decide enrolarse en la Legión.
Transcurrido el tiempo llega al cuartel una orden de detención y Carlos y sus superiores deciden que su nuevo lugar está en la División Azul, de donde parte para Rusia y es aquí donde Barrero me da una lección de nuestra historia que yo desconocía. He aprendido lo que fue la División azul en realidad, un despropósito de muerte para jóvenes que hubiesen sido más necesarios en una España devastada por la guerra civil. Gracias Barrero, éste capítulo no viene en los libros de Historia, al menos hasta donde yo he llegado.
Al final el detective Corazón encuentra en paradero de Carlos y tiene una entrevista con él. Si queréis saber lo que saca en claro no deberías perderos la historia porque no tiene desperdicio, sobre todo en las descripciones que hace de las masacres perpetradas durante todo el período. Además Barrero nunca deja de lado la tierra donde nació y con sus descripciones y el lenguaje puro asturiano que utiliza te transporta a las verdes tierras del Norte.

En conclusión, me sigue encantando este autor y la forma que tiene de tratar la Historia más reciente de España.