miércoles, 9 de febrero de 2011

Comprometida


Comprometida, Elizabeth Gilbert, Suma de Letras, 2011
Y otra vez a vueltas con las segundas partes.
Después de leer Come, Reza, Ama, y pensar que la historia estaba cerrada y bien cerrada con un final feliz entre Liz y Felipe la autora nos sorprende con la continuación.
Pues se lo podría haber ahorrado, y no nos hubiéramos visto en la “obligación” de seguir leyendo para saber qué pasó con los tórtolos (llamadlo romanticismo o curiosidad).
Si lo que quería era exprimir la fórmula, mal. Si quería hacer un manual de autoayuda (mujeres del mundo, ¡casaos!), mal. Y si quería filosofar a modo de pasquín promatrimonial, peor.
La ha salido un pésimo estudio antropológico sobre el matrimonio, desde nuestros ancestros hasta hoy, aquí y allende los mares. Y ¿para qué? ¿sólo para decirnos que la pareja finalmente se casa? Pues me reitero…
Porque he tenido que buscar, específicamente, entre párrafos interminables sobre historias de matrimonios, para descubrir que un problema burocrático del brasileño cincuentón les “empuja” a casarse contra su voluntad (¡ja!). Y fueron felices y comieron perdices.
Si hiciéramos caso de los refranes cuántos libros nos ahorraríamos. No perdáis el tiempo.
Virginia

1 comentario:

  1. Ainsss que no aprendes compañera, segundas partes buenas, El Padrino y poco más : )

    ResponderEliminar